28 Oct TERMITAS: APLICAR UNA BARRERA QUÍMICA O REALIZAR UN TRATAMIENTO CON CEBO
Hace poco me consultaba un compañero que debía hacer un tratamiento en una vivienda (relativamente grande) donde tenían un problema importante de termitas. El problema estaba generalizado a toda la vivienda y la duda era si tratar químicamente eliminando los individuos presentes y, simultáneamente, realizar una barrera química.
Yo lo tuve claro, para realizar la barrera química hemos de tener en cuenta varios aspectos:
- En primer lugar, el tratamiento sólo elimina los individuos presentes, no va a eliminar las colonias por lo que el problema va a persistir. Más aún, en muchas ocasiones lo que se consigue es la fragmentación de las colonias por lo que tras el tratamiento podemos encontrarnos con varias colonias de termitas.
- Por otra parte, conseguir una barrera química homogénea es prácticamente imposible y al final las termitas van a encontrar el camino para volver a entrar en la vivienda. No nos olvidemos que bajo la zona de inyección sigue habiendo tierra a la que no ha llegado el biocida y por donde las termitas seguirán pasando. Esto sin entrar en el problema de contaminación de las aguas subterráneas, motivo por el cual hay países donde este tipo de tratamientos están prohibidos.
- Otro aspecto importante es que con estos tratamientos hay que desalojar la vivienda durante un mínimo de 24-48 horas, solicitar permiso al ayuntamiento, señalizar la vía pública y acotar la zona de seguridad.
Sin embargo, si tratamos con cebos y se realiza un tratamiento correcto, conseguiremos la completa eliminación de la o las colonias que nos estén afectando. Además de presentar, bajo mi punto de vista una serie de ventajas:
- No necesitan desalojar la vivienda pues el producto no es tóxico para los humanos ni para los animales de compañía. Tampoco para el medio ambiente.
- No se requiere realizar obras.
El único inconveniente es que el tratamiento es algo más largo, un promedio de seis a nueve meses pero el resultado de eliminación total del problema creo que merece la pena.