29 Dic VENTAJAS Y PELIGROS DE LOS BIOCIDAS PARA LA HIGIENE VETERINARIA

En una explotación ganadera, la aparición de enfermedades infecto-contagiosas del ganado tiene graves consecuencias y supone un riesgo elevado para los animales y las personas.

Por este motivo, es fundamental prevenir zoonosis y plagas que puedan desembocar en pérdidas tanto económicas como del bienestar animal y humano. Este riesgo ha acompañado al ser humano a lo largo de la historia, pero, debido al crecimiento de la población y al aumento de la demanda de productos de primera necesidad de origen animal, este aspecto ha cogido más importancia si cabe.

Para prevenir estas consecuencias, uno de los aspectos más importantes es asegurar que los animales permanezcan en unas condiciones higiénico-sanitarias adecuadas.

Una herramienta fundamental para evitar la presencia de patógenos es llevar a cabo programas y procesos de limpieza y desinfección de las instalaciones y del resto de maquinaria en contacto con el ganado.

En este aspecto entran en juego los biocidas para la higiene veterinaria, que se tratan de productos zoosanitarios que tienen la finalidad de mantener en condiciones óptimas el entorno de los animales destruyendo, contrarrestando o neutralizando cualquier organismo nocivo y peligroso para el bienestar animal.

Algunos de estos organismos infecciosos pueden ser microscópicos, como virus y bacterias, y macroscópicos, como mosquitos y garrapatas.

Sin duda, debido a la importancia de las instalaciones ganaderas para proporcionar alimento a una gran parte de la población, evitar que se conviertan en focos de agentes patógenos es un aspecto a considerar.

Legislación

El avance de los conocimientos científicos ha hecho posible la creación de productos efectivos para el control de las enfermedades, y los biocidas para la higiene veterinaria son uno de ellos. Pero, por los componentes químicos que contienen, son sustancias potencialmente peligrosas para la salud humana, animal y ambiental.

Esto ha originado que se desarrollen normas cada vez más concretas y estrictas encaminadas a mejorar su conocimiento y control. Por esta razón, están sometidos a regulación gubernamental y la producción, clasificación, utilización y gestión de sus residuos están bajo el amparo de leyes, tanto europeas como nacionales.

Algunos aspectos de obligado cumplimiento sobre estas sustancias químicas, según establece la normativa, son:

• Estar registrados en el Registro Oficial de Biocidas según el Reglamento (UE) n.º 528/2012.
• Su utilización, manipulación y eliminación deben realizarse cumpliendo las normas de uso para los que están autorizados.
• Las personas encargadas de su tratamiento deben estar correctamente formados, con su respectiva acreditación.
• Estar prescritos por un profesional veterinario mediante un documento oficial o receta veterinaria.
• Adquirir en establecimientos autorizados.

Peligros de un uso inadecuado

La importancia para la salud que tienen los biocidas para la higiene veterinaria no deja lugar a dudas debido a su gran utilidad y eficacia a la hora de prevenir y evitar enfermedades patógenas que pongan en peligro al ganado y, por consecuencia, a las personas.

Pero una utilización inapropiada o abusiva de estos productos químicos pone en riesgo el medioambiente y puede dar lugar a consecuencias graves:

• Contaminación del suelo.
• Contaminación del agua superficial y subterránea.
• Contaminación del aire.
• Introducción y alteración de la cadena alimentaria de los animales.
• Alteración del comportamiento del ganado.
• Modificación de ecosistemas naturales.
• Contaminación o pérdida de calidad de los productos procedentes del ganado.
• Empeoramiento de la salud humana.
• Reducción de la productividad y rentabilidad de las instalaciones ganaderas.

Por estos motivos, al realizar tratamientos con biocidas para la higiene veterinaria es vital tomar medidas que contribuyan a evitar estos efectos adversos de tan complicada solución como, por ejemplo, utilizar las dosis idóneas, controlar los residuos generados en los centros de limpieza, desinfectar la maquinaria y el transporte animal y, sobre todo, tener en cuenta las medidas existentes.

Importancia de un correcto uso

Para reducir los riesgos y evitar accidentes derivados de un mal uso de biocidas para la higiene veterinaria hay dos aspectos a tener en cuenta:

• Tener los conocimientos necesarios sobre estos productos, ya que actualmente existe en el mercado un gran número de estos destinados a un uso específico y es fundamental elegir el correcto.
• Conocer las prácticas adecuadas de su tratamiento, aplicación y eliminación y saber manejar la maquinaria utilizada. El correcto mantenimiento y regulación de esta es vital para asegurar su eficacia.

Por tanto, es conveniente destacar el papel que desempeñan los profesionales encargados del manejo de estas sustancias químicas y la formación que reciben para conseguir el objetivo que se persigue con su utilización.

Conclusión

La creación de biocidas para la higiene veterinaria ha supuesto una gran mejora respecto a la seguridad y rentabilidad de las instalaciones ganaderas y la calidad de los productos de procedencia animal.

Pero, debido a la naturaleza de estos productos químicos y su peligrosidad, es necesario que los responsables de su aplicación estén debidamente formados y capacitados para asegurar las ventajas que ofrecen y prevenir las graves consecuencias que originaría realizar un mal uso de ellos.

En Didascalia somos conscientes de la importancia de formar a profesionales capacitados para aplicar biocidas para la higiene veterinaria correctamente, y por eso ofrecemos formación especializada en esta línea con dos niveles de capacitación, básico y cualificado.